Sepa cuáles son las estrategias a seguir para obtener la ansiada libertad financiera durante la emergencia sanitaria por COVID-19
La extensión del Estado de Emergencia por los efectos de la pandemia del Covid-19 ha dado nuevamente un duro golpe a la economía familiar de todos los peruanos, en la mayoría de los casos llevándolos a una crisis difícil de afrontar, más aún si cuentan con deudas que hasta el momento no se han terminado de pagar.
Juan José Luna, gerente comercial de alDía, empresa peruana especialista en solución de deudas y asesoría financiera, te aconseja cómo conseguir la tan ansiada salud financiera.
¿Cómo afrontar el pago de mis deudas si ya no percibo ingresos o éstos se han reducido?
Revisa tus ahorros y elimina los gastos innecesarios, por más insignificantes que parezcan. Desde la compra de un postre casero, pasando por gastos adicionales de delivery hasta la membresía de servicios de entretenimiento, todo suma. Ahorrar dinero te permitirá decidir, con calma y prudencia, tus próximas acciones para generar nuevos ingresos.
Genera nuevos ingresos emprendiendo un pequeño negocio sin salir de casa. Puedes solicitar el apoyo de tu familia con ideas creativas para salir adelante.
Renegocia el pago de tus deudas y/o aprovecha las facilidades de pago que actualmente las entidades financieras están ofreciendo.
¿Qué hacer si todos mis esfuerzos no me ayudan a saldar mis deudas?
En caso estés pasando por una crisis financiera difícil de resolver, puedes recurrir a la capacitación y la asesoría de una reparadora de deudas que son las especialistas para atender problemas de dinero. Por ejemplo, alDía.pe cuenta con el programa MIJUNTA que consiste en un cronograma de ahorros ajustado a los ingresos de cada persona con la finalidad de generar un fondo y así ayudarlos a estar listos para negociar una liquidación de sus deudas. Una metodología con gran impacto social, ya que inculca el hábito del ahorro y la educación financiera.
¿Quiénes pueden participar del programa MIJUNTA?
- Participan todas las personas con deudas vencidas y tienen la voluntad de solucionarlas, pero los plazos de las entidades financieras no les son favorables.
- Personas naturales que adeudan entre 2 a 5 entidades financieras.
- Personas naturales con deudas “sin garantía”, tales como hipotecas, vehículos, prendas, etc., ya que estas tienen otro tipo de recuperación que podrían implicar temas legales.
